domingo, 22 de junio de 2008

Perdiciones Nacionales (y I): El Café

La entrada de la wikipedia sobre el café nos cuenta que, allá por el siglo XVI de nuestro calendario, el mundo islámico sopesó cuidadosamente si el café era una forma de intoxicación y por tanto contraria a la doctrina. Se ve que legislaron que no, y yo hasta irme a vivir a Grecia hubiera dicho lo propio. Ya no.
El café es el elemento clave de la vida griega hasta el punto de que no se puede entender a los griegos sin entender el papel del café en sus vidas y sus actos.
No sé si ponerlo tal y como lo siento. ¡Venga, allá vamos!:
VAN HASTA LAS PATAS.
Un porcentaje muy significativo (mayoritario) de griegos desayuna un café por las mañanas. La frase os parecerá estúpida, así que la aclaro: sólo un café solo. Sin bollo, ni tostadas, ni churros (¡Ay , qué monazo hemos tenido, dios mío!) ni de .
Ese es el primero de los muchos que van cayendo durante el día.
La tipología de los cafés es también curiosa:Lo suyo es, en teoría, tomar un café griego (ελληνικό καφέ) es decir, lo que en el resto del mundo se llama un café turco-en la foto a la derecha-, en un ejemplo perfecto del tabú por excelencia de la sociedad griega: la herencia turca. El problema del café griego es que al hacerse con el café molido muy fino y directamente en el cazillo (llamado briki, vedlo en la foto) está lleno de posos y hay que esperar pacientemente a que se vayan al fondo, para luego evitar cuidadosamente comérselos. El resultado es que pese a que los griegos se toman su tiempo para todo ( y bien que hacen), la cosa es bastante incompatible con la vida moderna.
De estos posos vienen las espumas posteriores, y es que Grecia vive ahora bajo el imperio del frappé.
Si Afrodita nació de la espuma del mar (y de ahí su nombre, ¿Verdad filólogos míos?) La Grecia moderna nace de la espuma del frappé -en la foto a la izquierda-.
Al parecer en 1957 en Tesalónica sufrieron un apagón (¡Cómo este invierno en Atenas! ¡Qué casualidad!... o no) aunque la versión francesa de la wikipedia da menos detalles -los hechos legendarios es lo que tienen, http://fr.wikipedia.org/wiki/Café frappé - y Dimitrios Vakondios -desde aquello Prócer de la Patria Helena- al no poder calentar el agua para su Nescafé decidió tomarlo sea como fuere. Griego hasta la médula el tipo.
El frappé se prepara rápido y se toma despacio. Se pone el nescafé(2 a 3 cucharaditas) y el azúcar ( a gusto, de entrada tanto como café), se cubre justo de agua y se bate haciendo la espuma más sólida posible. Luego se añade un chorrito de agua fría ( lo más difícil de calcular) y un par de cubitos de hielo. La gracia es que, a diferencia de nuestro café con hielo, el frappé no se agua, sino que la espuma y el hielo se funden simultáneamente y la densidad es, más o menos, constante.
PEASO INVENTO
Un griego tarda de 40 minutos a una hora en tomarse uno. El resultado es que en realidad te cobran por el tiempo que te pasas en la cafetería; de hecho, en plástico para llevar te cobran mucho menos.
Una vez enviciados, los griegos consumen todas las formas de café: capucccino, expresso, fredoccino (helado de café con leche, taquicardia más hiperglucemia, ¡Guau! ¡Mi cuadro clínico favorito...!) y a todas horas. Alguno nos ha asegurado tomar no menos de ocho al día...
Un vicio que exalta el lado más inquietante del carácter griego, la irascibilidad. Los griegos llevan muy mal el estrés y el café no les ayuda, la verdad. Eso sí, creo que es una de las causas de que, pese a lo golosos que son, no engorden más. El café quita y mucho, el apetito.
Se ve a la gente con los frappés en la mano a todas horas, andando, en el coche, en la moto, como motos.
Es una perdición.

sábado, 14 de junio de 2008

Interludio madrileño: ¡Que vivan los novios!

Como apunta el título estoy en Madrid para la boda de Teresa, mi prima la menor, que dirían los romanos.
La cosa ha ido bien, sin sorpresas, la boda ha sido un éxito. Mi prima estaba guapísima -creo que es un comentario objetivo- y al novio se le veía feliz, algo que en estas situaciones es menos fácil de lo que parecería, con tanto lío y tanta familia, incluída la mía.Las fotos son cortesía de mi primo Ramón, que sí se llevó la cámara... no sé porqué, últimamente me la dejo a menudo en casa.Obsérvese los aires de familia: en los extremos los "Aguilar y/o Montoro" morenos y, eventualmente, calvos; en el otro extremo los "de Francisco y/ o Sintes" rubios y ojigrises. Lo bonito es ver las mezclas dentro de los hermanos y primos.También estoy en Madrid para la "pantomima-oposición 2008". No voy a contaminar este blog con las turbias obscenidades que la cosa me sugiere. Entre los del Gobierno de la Comunidad, que no ocultan su "amor" por la enseñanza pública (impagables las declaraciones de la Consejera en las recientes micro-huelgas) y un gobierno central, que habla para la galería pero lleva a sus hijos a donde los lleva (Pepiño, te haría comer el Concordato con cachelos...), estas oposiciones son lo dicho: una pantomima. Para eso es mejor dejar de hacer funcionarios... con la única excepcion de los sindicalistas, claro.
En los próximos "posts" voy a repasar desde la distancia algunos aspectos de la cotidianidad griega, no por criticarlos sino por que se vea bien claro lo cerca y lo lejos que pueden estar dos países con un entorno natural e incluso cultural no muy distinto.

sábado, 7 de junio de 2008

Recordemos Lepanto

Tenía ganas de ir a Lepanto. Como muchos sabéis, soy un cervantino de pro, y aunque no me va mucho el rollo del culto a la personalidad, ni de la biografía del artista romántico, la cosa tiene sus resonancias.De entrada Lepanto no existe. Quiero decir que si miráis en un mapa de Grecia no lo vais a encontrar. Lepanto es el nombre veneciano, en griego el sitio se llama Ναύπακτος, transcribible por Naupacto o Náfpacto según gustos. Dicho esto, el sitio es precioso (Lat. 38°23'33.30"N Long. 21°49'46.03"E). Es una fortaleza veneciana como otras muchas de las que hay en Grecia, especialmente en el Peloponeso, pero particularmente recoleta y amable. Hoy en día vive como sitio turístico en la costa norte del golfo de Corinto, La zona se ha visto relanzada por la inauguración del espectacular y carísimo puente de Rion-Antirion (11,20€ de peaje ¡Ay!) que permite a los turistas que vienen de Delfos ir hacia Olimpia sin tomar los pequeños barcos que hacían el servicio entre ambos lados del golfo de Corinto, o sin recular hasta la propia Corinto, cosa nada aconsejable dada la carretera que luego se menciona.El viaje ha tenido lugar porque Maricarmen tenía que ir por trabajo a Patras, tercera ciudad de Grecia en población y puerto de conexión (junto con Igoumenitsa) de los barcos que van y vienen a Italia cargados de todo. Las carreteras -y sus circunstancias- de Serbia, Albania, Macedonia (perdón, F.Y.R.O.M. o Σκόπια) y Bulgaria hacen que el barco siga siendo la manera favorita de llevar carga a Grecia. Hay en Patras un instituto del "Programa Piloto de Español en Secundaria" y allí se ha ido Mi Querida Esposa a animar a la parroquia a estudiar español.
El trayecto hasta Patras ha sido... entretenido. Como muestra esta foto de Google Earth en la que podéis ver un peaje en una carretera de doble dirección. Aclaro: te cobran peaje en una carretera normal, no desdoblada. Dicen que es para hacer la autopista cuando se pueda, os recuerdo que Patras es la tercera ciudad del país y nido y madre de camiones que vienen de (l resto de) Europa. En la foto podéis ver como la carretera se convierte en doble dirección por el procedimiento kamikaze: el que quiere se hace a un lado por el arcén y el que quiere pasa por en medio, no es raro que cuatro coches coincidan en paralelo por dos carriles y, aparentemente, se pierde más la vida que los nervios por ello, como ya vimos en el post de "Aquiles y la Tortuga".
ÚLTIMA HORA:
El post estaba casi escrito a falta de alguna foto, cuando han sobrevenido dos cosas: primero un terremoto de 6,5 grados en la escala Richter (o sea, bien bien gordo) con dos personas muertas y al menos setenta heridas el domingo 8 de junio, justo en la zona de Patras. Nosotros ya estábamos en Atenas y aquí no se ha sentido... tres días antes lo hubiéramos pillado de lleno.
Lo otro es que la edición dominical del diario "Η ΚΑΗΘΕΜΕΡΙΝΗ" (o sea, "La Diaria"...) llevaba un largo artículo sobre la carretera y el peaje arriba reseñados. Las gónadas de pajarita se ponen al leerlo. Es, de entrada, la carretera más peligrosa de Grecia y la historia de corrupción alrededor de la concesión administrativa para hacer la autopista es delirante. Confirma el artículo, además, mis sospechas de que es completamente ilegal en la Unión Europea cobrar peaje en carreteras no desdobladas y también en tramos inconclusos. Y ahora, ¿A quién reclamamos la devolución? En la zona los lugareños están boicoteando los peajes y parece que no hay lo que tiene que haber para poner las multas, así que hicimos el canelo pagando. Eso sí, que nadie me diga que mi vida es aburrida o que necesito más adrenalina...